Durante toda la temporada, Red Bull ha estado amenazando con irse de la Fórmula 1 por no estar de acuerdo con las reglas, que según ellos beneficiaban enormemente la prolongación del dominio de Mercedes. La escudería de las bebidas energéticas, con el objetivo de igualar más la parrilla y de verse con más posibilidades de ganar, es una de las que más está ayudando a configurar la radical normativa que verá el Gran Circo en 2017. Helmut Marko asegura que dentro de dos temporadas habrán dado "un paso en la dirección adecuada".

"Visualmente los coches serán más agresivos y más difíciles de dominar para los pilotos. Eso es lo que buscamos. Y Dietrich Mateschitz, gracias a Dios, es un aficionado de los deportes del motor que ve la F1 como la plataforma ideal para oportunidades de marketing. Pero primero el producto tiene que ser el adecuado para los aficionados y tenemos que tener la oportunidad de ganar. Entonces, a corto plazo necesitamos un motor ganador", explica Marko para Auto Bild.

"La próxima actualización de Renault llega en Sochi. Entonces veremos", añade Marko, que admite que los franceses han ido mejorando su propulsor a lo largo del año.

"A pesar de nuestro déficit de potencia, otra vez tenemos el mejor chasis desde Hungría. Lo podemos ver en los datos de los GPs. La mejor prueba es Daniel Ricciardo, cuya confianza ha vuelto. Como si algo de repente hubiera hecho un click en su cabeza. Tuvimos problemas. Le tuve que decir a mi equipo que no por no tener el mejor motor, no significa que no tengamos que intentarlo todo para tener el mejor chasis", finaliza Marko.

Marko aclara que no son malos perdedores: "Sólo nos preocupa el futuro de la F1"