Kevin Magnussen tiene ganas de afrontar este fin de semana el Gran Premio de Italia. Tras su accidente de Spa, el danés se realizó más pruebas en su país natal y los médicos certificaron que es apto para disputar el próximo evento, no obstante, la FIA se pronunciará mañana, jueves.

Me siento bien, gracias. Fue un gran accidente y estuve dolorido pero afortunadamente no tuve nada peor que un tobillo dañado. Me hicieron algunas pruebas más en Dinamarca y trabajo con mi fisioterapeuta para mantenerme en forma. Me siento preparado para Monza. La FIA, por supuesto, tendrá la última palabra pero realmente quiero y confío en que entonces estaré bien”, ha explicado el danés en el previo habitual que elabora Renault antes de cada cita.

Magnussen ha destacado el aspecto histórico del Autódromo Nacional de Monza, porque es precisamente lo que hace a la prueba de este fin de semana especial, además de que se celebra en la pista más rápida de todo el Campeonato.

Hay muchas razones por las que Monza es especial pero creo que el hecho de que tenga tanta historia lo hace un evento especial. La pista es única también, con muchas rectas largas y curvas lentas. Tiene curvas de alta velocidad que suponen un reto también, así que simplemente son realmente buenas. Además de eso, tienes uno de los mejores ambientes de la temporada”, ha recordado.

Magnussen ha podido ver la pista antigua y ha reconocido que no se imagina las sensaciones que pudieron haber tenido los pilotos que corrían allí. “El trazado antiguo es muy guay y muy diferente a lo que conocemos hoy. Entonces corrían en una pista ovalada, los coches eran tan básicos y rápidos y…¡sin cinturones! Es realmente especial verlo, estar allí y setir el ambiente. Es una de esas cosas en las que son realmente difíciles de imaginar las sensaciones, cuando ves Le Mans ahora, te puedes imaginar las sensaciones, ya que la pista no es tan diferente, pero cuando ves vídeos de Monza de entonces, no te lo imaginas, todo era tan diferente”, ha apuntado.

Su cuenta pendiente con esta pista es conseguir una victoria, ya que al podio sí que ha llegado aquí en otras categorías, pero no al primer puesto, algo que se propone conseguir. “No ha sido la mejor pista para mí pero ha estado bien. He tenido podios en casi todo lo que he pilotado, pero nunca he ganado allí, ¡así que claramente tenemos que arreglar eso!”, ha asegurado.

Además, tras su actuación en Spa, dada la posición en la que rodaba cuando tuvo el accidente, se siente animado para afrontar la segunda parte de la temporada, de tal manera, que se la tomará prueba a prueba. "Bélgica estuvo bien y mejoramos a lo largo del fin de semana. Italia es otra pista, tiene algunas características de Spa pero no las mismas. Lo que hemos aprendido es que nos debemos tomar cada circuito por separado y reaccionar a las situaciones en las que nos encontremos. Espero que haga calor de nuevo, así que necesito estar centrado. No te puedes preparar realmente para el calor, simplemente necesitas estar hidratado y permanecer a la sombra", ha comentado.

Tampoco se ha olvidado de los tifosi, quizás los aficionados más apasionados del mundo. A pesar de estar en tierra italiana, guardará dieta estricta e intentará no dejarse seducir por las deliciosas pizzas. "Puedes sentir a los aficionados en torno al circuito, está bien poder conocerlos en el pitlane o en la sesión de autógrafos. Soy el único danés que corro aquí así que cuando veo una bandera danesa, sé que es por mí y eso está muy bien. Te da un empujón y cuando les veo mientras corro, es realmente guay. Me encanta Italia, pero este fin de semana me tendré que alejar de la pizza. Me quedaré con la pasta, la ensalada caprese y el carpaccio, ¡gracias!", ha expresado.

Por su parte, a Jolyon Palmer le divierte pilotar en Monza, una pista de la que también ha subrayado su carácter histórico y las diferencias con el trazado antiguo. El británico ha afirmado que aquí se va al máximo y que eso hace esta prueba especial.

"Es un circuito muy especial y uno que me encanta absolutamente. Tiene mucha historia, muchas carreras se han celebrado en Monza y muchos pilotos grandes han ganado, sobre todo antes, cuando tenías que ser rápido e increíblemente valiente. Luego está la pasión de la gente, puedes oír a los aficionados cuando pilotas. La pista es de la vieja escuela y es divertida para pilotar. Quitamos mucha carga aerodinámica para ir al máximo y puede haber muchos adelantamientos. Es divertido", ha insistido.

A pesar de que este es el año de debut de Palmer en la F1, el inglés ya ha saboreado la victoria en Monza cuando competía en otras categorías. "He ganado y he logrado la pole en la GP2 y, además, he ganado dos veces en la Fórmula 2. Me gusta mucho correr en Monza y creo que en realidad es una de mis mejores pistas. Participé en los entrenamientos libres el año pasado, así que ya he pilotado aquí en un coche de F1, que es una buena experiencia, así que tengo ganas de llegar allí y de subirme al coche", ha apuntado el piloto del dorsal número 30.

Palmer también ha explicado las características del circuito, así como las áreas a tomar en cuenta a la hora de preparar el ajuste del coche. No obstante, ha reconocido que será un GP duro para el equipo Renault, ya que este trazado pide mucha potencia y ese no es el punto más fuerte del conjunto galo.

"Con esas rectas, naturalmente, se necesita una buena velocidad punta y luego estabilidad en la frenada. Hay un montón de rectas de alta velocidad y curvas muy lentas por lo que se necesita baja carga aerodinámica con la necesidad de frenar tarde y dureza en los frenos. Se trata de encontrar una buena velocidad punta, con el nivel de carga aerodinámica óptima para las chicanes. Vamos a Monza conscientes de que será difícil, ya que no se ajusta a las características del coche. Sin embargo, también pensábamos que era así en Spa. De igual manera fue duro, aunque mejor de lo esperado, sobre todo en la clasificación. Tenemos que afrontarlo de manera positiva, seguro que en cada carrera vamos hacia adelante y ahora hay que ver cómo lo hacemos", ha concluido el británico.