No será una jornada plácida para los mecánicos de Renault. Tanto Joylon Palmer como Kevin Magnussen golpearon las barreras por lo que tendrán trabajo por delante para poner a puntos sus respectivos vehículos. La pista de Mónaco, como viene siendo habitual, está lejos de su punto óptimo de manera que se ha presentado muy deslizante.

En la primera sesión, Magnussen logró registrar un 1:18.274 que le llevó a la decimosétima posición, mientras Palmer marcó 1:18.871 para acabar vigésimo. El británico impactó el muro en Tabac de manera que forzó la aparición del coche de seguridad virtual.

Ya durante el pase de la tarde, Magnussen chocó en la última curva y, de igual que hizo su compañero a la mañana, el coche de seguridad virtual tuvo que hacer acto de presencia. El ex de McLaren paró el cronómetro en 1:17.530 para ser otra vez 17º. Palmer tan sólo pudo rodar los 30 minutos finales ya que a los técnicos de Renault no les dio tiempo de reparar el RS16. Decimonoveno mejor tiempo con 1:17.761 para el debutante.

Magnussen ha destacado las dificultades de pilotar el monoplaza en un asfalto tan escurridizo. Achaca a este factor el percance de Anthony Noghes y a su vez se muestra contento de la mejora que produce la nueva especificación del propulsor que el equipo de Enstone estrena en Montecarlo.

"No fue el mejor de los días para nosotros. Pensábamos que podríamos dar un paso adelante con el test de Barcelona pero el coche no se ha comportado como esperábamos aquí. La última versión del motor ha dado un buen resultado ya que es una mejora importante pero todavía tenemos trabajo por hacer en los reglajes y en el agarre general del coche. Fue desafortunado acabar antes de tiempo la segunda sesión. Sufrí subviraje y acabé en el muro. Intenté girar pero no pude hacer nada. Los datos han mostrado que no fuimos más rápidos que en la vuelta anterior así que es frustrante. Afortunadamente, sólo tengo dañado el alerón delantero del monoplaza por lo que resultará una labor fácil para mis mecánicos", ha destacado el danés.

Por su parte, Palmer confía en que, aunque no fueron demasiado rápidos, las mejoras encontradas en los entrenamientos de Barcelona tengan un efecto positivo. "Hemos descubierto muchas cosas sobre la dirección en la que queremos ir y creo que podemos hacer mejoras en ese sentido. El día no comenzó cómo nos hubiese gustado. Cometí un error en Tabac debido a que la pista estaba deslizante. Tuve un pequeño momento de sobreviraje en el momento que apretaba y golpeé las protecciones. Intentamos algo que probamos en el test de la semana pasada y, aunque no éramos rápidos, tuvimos buenas sensaciones. ¡Esperemos a ver qué ocurre el sábado!", ha añadido.

El director técnico de Renault, Nick Chester, ha lamentado la ocasión de haber rodado más en la pista por causa de los accidentes pero confía en que se pueda obtener más velocidad del RS16 después de estudiar en profundidad la información recogida en la fecha de hoy.

"Aprendimos una gran cantidad de información en referencia a la configuración del coche hoy con ambos pilotos a pesar de haber perdido tiempo en pista. Hemos hecho algunas mejoras entre las dos sesiones pero tenemos que tratar de exprimir todavía un poco más el monoplaza, especialmente cuando montamos los neumáticos ultrablandos. Mañana vamos a analizar los datos y nos aseguraremos en optimizar al máximo nuestras posibilidades", ha finalizado.