El E20 negro y oro, monoplaza con el que también compite el campeón del mundo de 2007, Kimi Raikkonen, no ha logrado comenzar una sola carrera en lo que va de temporada desde la primera fila de la parrilla, pero se ha revelado como uno de los coches que mejor cuida los neumáticos, lo que contribuye a que sus pilotos escalen posiciones los domingos.

En este sentido, Romain Grosjean -vigente campeón de la GP2- ha insistido en que la diferencia entre el Lotus y los mejores monoplazas de 2012 no es grande. "Necesitamos calificar mejor, ése no es nuestro punto fuerte esta temporada pero estamos trabajando en ello. Si somos capaces de firmar un fin de semana sólido desde el inicio, podemos luchar por el podio e incluso por la victoria", afirmó.

En similares términos se ha expresado el director técnico del equipo, James Allison, para quien conseguir una mejora los sábados, por pequeña que ésta fuera, resultaría "clave" para conseguir el objetivo de la victoria. "A menudo hemos sido rapidísimos en calificación con el neumático más duro, pero luego mejoramos poco con el más blando; ése es un problema en el que estamos trabajando actualmente", detalló.

"Hay coches en la parrilla que son muy rápidos en calificación pero no tan competitivos en carrera, y viceversa. Parece que nuestro coche no está entre los más rápidos en calificación ahora mismo, pero tiene un gran ritmo en carrera. No es una mala combinación, y preferimos esto a lo contrario, pero si queremos ganar carreras tendremos que mejorar ese aspecto", insistió.

A lo que añadió: "No nos va a llevar mucho, sólo necesitamos un pequeño extra para competir por mayores cotas".