La segunda edición del ahora Gran Premio de Azerbaiyán de Fórmula 1 será recordada. Lo que apuntaba a una carrera monótona tras una salida alocada se volvió completamente incontrolable con la aparición de los coches de seguridad.

Las resalidas dejaron momentos inimaginables, adelantamientos dobles, toques y mucha polémica, una locura que se explica cuando el ganador partía en décima posición y tuvo que hacer una parada no programada en la sexta vuelta y cuando el segundo clasificado destrozó su coche en la primera vuelta y llegó a estar doblado durante gran parte de la prueba.

xView full post on X