En la reunión mantenida en Canadá antes de que se inicie cualquier tipo de actividad en la pista, los equipos han adoptado una posición unánime en contra del regreso de los repostajes al Mundial de Fórmula 1. Dicho encuentro, que acabó siendo una asamblea del Comité de Trabajo Deportivo, el cual se encarga de definir el reglamento, ha dejado claro la postura que existe ahora mismo sobre el asunto tratado.

Después de que varias voces autorizadas dentro del paddock expresasen una postura favorable a la permanencia de la regulación actual en ese sentido, las formaciones del campeonato han descartado la reintroducción de los repostajes por razones de peso. La primera y que más se ha valorado es que cuando estos se suprimieron para el mundial de 2010, en dicha temporada la acción en pista se incrementó notablemente.

Según ha apuntado motorsport.com, otro detalle que tampoco se ha visto con buenos ojos es que este cambio en la normativa obligaría a los coches a llevar una determinada cantidad de combustible durante la clasificación, lo cual distorsionaría la verdadera velocidad de cada bólido en la jornada del sábado y no permitiría apreciar con claridad cuál es el más veloz a una vuelta.

Evidentemente, el incremento del gasto también ha jugado un papel importante. La vuelta de los repostaje supondría un aumento de los costes de 1,3 millones de euros aproximadamente el primer año de su regreso y alrededor de 690.000 euros en los cursos siguientes.

Por último, el riesgo que podría suponer pasar a utilizar aparatos que por cada segundo expulsaran 33 litros de combustible en lugar de 12, para así mantener la velocidad actual de un paso por boxes, también ha afectado.

De este modo, después de que los equipos hayan declaro claro su postura respecto ese asunto, es de esperar que Charlie Whiting trasmita esta al Grupo de Estrategia, el cual la presentó el pasado 14 de mayo. Teóricamente, la propuesta no debería salir adelante, a pesar de que Bernie Ecclestone sí que vea la idea con buenos ojos.