Día muy complicado para Force India en el Gran Premio de Mónaco. El equipo indio no pudo continuar con su racha de carreras consecutivas finalizando en los puntos con los dos coches, logro que habían conseguido en las primeras cinco citas de la temporada. El fin de semana de Sergio Pérez y de Esteban Ocon se vio afectado por los incidentes, tanto en los entrenamientos como en carrera.

Pérez tuvo un toque con Carlos Sainz en la primera vuelta que dañó su alerón delantero, por lo que el mexicano tuvo que adelantar su parada para realizar un cambio de alerón. Este incidente costó mucho tiempo a Pérez, pero fue capaz de ir recuperando posiciones según el resto de pilotos realizaban sus paradas. La salida del coche de seguridad le permitió acercarse al grupo, pero Pérez arriesgó demasiado en sus maniobras de adelantamiento. Intentó adelantar a Daniil Kvyat en la Rascasse pero no tenía espacio suficiente, por lo que ambos chocaron y el ruso quedó fuera de carrera. Pérez tuvo que entrar en boxes, pero pudo seguir hasta finalizar 13º.

De esta forma no solo se acaba la racha de Force India. También esta carrera puso fin a la racha personal de Pérez, que había puntuado en los últimos 15 Grandes Premios. El mexicano había logrado terminar entre los diez primeros desde el Gran Premio de Alemania que se disputó en julio del año pasado, lo cual es bastante destacable para un piloto de la zona media.

Por su parte, Ocon sufrió un accidente en la tercera sesión de entrenamientos libres que lastró su ritmo en clasificación, donde se quedó en la Q1. La carrera no fue mucho mejor para el francés, que se quedó atascado detrás de pilotos con menos ritmo durante la mayor parte de la carrera. Ocon solo pudo recuperar posiciones gracias a los diferentes abandonos que hubo durante la prueba, pero en ningún momento tuvo opciones de luchar por los puntos.

La parte positiva para Force India en este fin de semana es que su principal rival por el cuarto puesto del campeonato de constructores, Williams, apenas pudo sumar dos puntos gracias al noveno puesto de Felipe Massa. De esta forma, el doble cero de Mónaco es menos doloroso de lo que podía haber sido si el brasileño hubiera sumado una mayor cantidad de puntos.