La familia de Jules Bianchi lanzará acciones legales contra la FIA, Marussia y la FOM por el accidente que sufrió su hijo en el Gran Premio de Japón 2014, cuando pilotaba para el equipo Marussia. El francés sufrió una lesión axonal difusa tras chocar con un vehículo de extracción y tras nueve mese de lucha, murió el pasado julio.

"Queremos justicia para Jules y queremos la verdad sobre las decisiones que hicieron que nuestro hijo sufriese un accidente en el Gran Premio de Japón en 2014. Como familia tenemos muchas preguntas sin responder y sentimos que el accidente de Jules y su posterior muerte podría haberse evitado si una serie de errores que no se hubieran cometido", ha asegurado Philippe Bianchi, padre de Jules en un comunicado.

La FIA, encargada de investigar el accidente, produjo un informe de 396 páginas en el que se indicaba que Bianchi
"no redujo de velocidad lo suficiente para evitar perder el control" cuando chocó, mientras los comisarios recuperaban el Sauber de Adrian Sutil en la carrera de Suzuka.

Su familia no está de acuerdo con culpar a Jules y buscan limpiar su nombre, además de conseguir dinero para ayudar a jóvenes pilotos y mejorar la seguridad. "La muerte de Bianchi podría haberse evitado. El panel de informes de la FIA sobre este accidente ha hecho numerosas recomendaciones para mejorar la seguridad en la Fórmula 1 pero falló al identificar los errores que llevaron a Bianchi a la muerte. Fueron sorprendentes y angustiosas para la familia las conclusiones de la FIA, se observan unos factores que culpan a Jules. La familia de Bianchi ha determinado iniciar un proceso legal para obtener respuestas de los involucrados para asumir la responsabilidad de los fallos. Es importante para los actuales y futuros pilotos que se confíe en la seguridad y que ésta deba ir por delante. Si éste hubiese sido el caso de Suzuka, Jules Bianchi posiblemente seguiría vivo y en competición en el deporte que amaba", ha añadido Julian Chamberlayne, en representación de la familia de Bianchi.