Mientras que Team Lotus espera llamarse Caterham la próxima temporada, Renault desea que Lotus se implique más en la escudería. Pero los cambios han de ser aprobados con 18 votos de la Comisión, compuesta por 26 miembros: los equipos, Ecclestone, el presidente de la FIA (Jean Todt) y representantes de los promotores de las carreras, fabricantes de motores y patrocinadores.

Recientemente la Asociación de Equipos de Fórmula 1 (FOTA) informó que no bloquearía el cambio de nombres de las escuderías, y un simple voto por fax de la Comisión bastaría para autorizarlo. Pero otras fuentes argumentan que Ferrari, Sauber y HRT han pedido clarificaciones sobre la situación y una mejor discusión en la Comisión sobre las implicaciones del cambio de nombres.

Se cree que hay dudas y preocupaciones sobre las consecuencias de permitir a los equipos cambiar fácilmente sus nombres, por el daño que pudiera causarse en la imagen de la Fórmula 1 si sus miembros constantemente cambian de logotipos. Si la Comisión finalmente se echa atrás y no aprueba los cambios, Lotus y Renault perderían sus correspondientes derechos televisivos si aún así deciden seguir adelante con el cambio de nombres de sus respectivas escuderías.