Carlos Sainz guarda un grato recuerdo de su última actuación en Hungría, especialmente de la clasificación, en la que protagonizó una de sus mejores actuaciones de 2016 en una pista prácticamente empapada.

Por ello, el español espera repetir la hazaña este fin de semana, pues cree que la carrera, en condiciones normales, es bastante simple debido a la dificultad de realizar adelantamientos.

"Diría que la clasificación del año pasado fue uno de mis mejores momentos de la temporada. La pista me gusta, especialmente en clasificación. ¡Es una vuelta muy intensa! Recuerdo ser 13º en los Libres 3 y, de repente, hice una de las mejores vueltas de mi vida en clasificación con neumáticos intermedios. Terminé 4º en la Q2, por lo que me pude meter en Q3, algo que nadie esperaba. Después puse los neumáticos de seco en una pista húmeda y terminé 6º. ¡Disfruté mucho! La carrera en sí, si no llueve, no es demasiado especial. Es bastante difícil adelantar, un poco como en Mónaco", indica.

"La carrera, si no llueve, no es demasaido especial"

Además, el piloto de Toro Rosso reconoce su pasión por Hungría y Budapest, pues es un fin de semana del calendario en el que se siente muy querido por los aficionados.

"Budapest es una de mis ciudades favoritas en el mundo. Tiene muchas atracciones históricas, buenos restaurantes. Los fans son increíbles: tengo una foto en Instagram donde ves a todos los aficionados a mi alrededor y es difícil encontrarme en la foto. Esto lo convierte en un fin de semana especial y me siento muy querido en Hungría. Tengo muchos fans aquí, ¡lo cual es genial!", concluye.