Uno de los beneficiados de la presencia de Fernando Alonso en las 500 millas de Indianápolis ha sido Jenson Button. El británico, retirado oficialmente tras 2016 con aquella extraña posibilidad de regresar en 2018, fue designado para sustituir a Fernando en el Gran Premio de Mónaco, prueba que el asturiano se saltará.
A pesar de que Jenson no conoce los vehículos de 2017, McLaren no realizó ninguna jornada de prueba para el británico, cuya preparación ha sido física completada con sesiones de simulador en las cuales se ha rumoreado que incluso llegó a probar el agua del mar mediterráneo. Pese a todo, el campeón del mundo de 2009 admite no tener presión y venir a esta prueba a disfrutar.
“La preparación ha ido bien. Estar en los test de Bahréin hubiera sido inútil para mi. He hecho simulador, he pasado mucho tiempo con él y ha sido interesante. Debo aprender algunas cosas. El coche y los neumáticos son más anchos y sé que son diferentes pero tengo un par de días para ello. Estoy muy relajado. Es muy emocionante, pero no siento absolutamente ninguna presión. El cuello me va a doler un poco después del jueves, pero tenemos el viernes libre así que tendré algo de descanso.”
“Seguro que veré las 500 millas de Indianápolis. Quiero saber qué dirá Fernando cuando vuelva. La clasificación le fue bien y esperemos que la carrera también. Me gustaría hacer Le Mans algún día y competir en NASCAR, donde he ido a algunas carreras este año y me encantó el espectáculo además de ser un reto increíble. También me gusta el Rallycross aunque nunca había pensando en la Indy.”, completó Jenson Button durante la rueda de prensa previa al Gran Premio de Mónaco.
