Christian Horner, jefe de equipo de Red Bull, asegura que la F1 se encuentra, actualmente, en una encrucijada para decidir las normas de los motores del futuro, pues deben decantarse por qué camino apostar para conseguir los resultados más positivos para el deporte.

Por ello, el británico cree que la llegada de Liberty Media como nuevos propietarios de la F1 ayudará a dilucidar con mayor claridad qué es lo que quiera la categoría para los años venideros.

"Creo que lo que es realmente interesante es que la Fórmula 1 está efectivamente en una encrucijada con la nueva reglamentación. Las reglas llegan, teóricamente, en 2021 y, probablemente, tendrá ocho o diez años de vida con esos motores, por lo que lo que estamos observando ahora tiene más relevancia para la F1 hacia 2030. Sobre 2030, ¿cuánta gente conducirá coches? ¿Serán autónomos? ¿Eléctricos? El mundo está cambiando muy rápido en este sector. La Fórmula 1 tiene unas cuantas preguntas serias que necesitan respuesta hoy a la hora de hacer el motor del futuro. ¿Cuál es el objetivo primario de la F1? ¿Es la tecnología o es un deporte y entretenimiento, y la máquina y el hombre está absolutamente limitado? Siento que con los nuevos propietarios, crean un gran entretenimiento, una gran contenido, el ruido, el sonido, la alegría de ver a los pilotos como estrellas; esa es su principal preocupación", explica Horner en declaraciones recogidas por Crash.net.

"El ruido y la acúsitca de los motores son un factor clave"

Así, considera que la acústica de los motores son un "factor clave" a la hora de determinar la reglamentación del futuro, ya que, mejorando este aspecto, contribuirá a una mejora de las carreras y del espectáculo.

"Espero que con la oportunidad de nuevos cambios de reglamentación lo que se debe discutir en este momento son los aspectos fundamentales del coste, rendimiento y atractivo para los aficionados. Por lo tanto, el ruido y la acústica de los motores son un factor clave en las regulaciones que se proponen. A su vez, producirá buenas carreras, reducirá los costes y devolverá algo de atractivo que los motores de épocas pasadas solían dar", concluye.