Christian Horner cree que Ferrari y Mercedes estarían contentos si Red Bull se hubiese ido de la Fórmula 1, ya que algunas de sus actuaciones les "asustaron" en 2015. Varias personas de este equipo y Bernie Ecclestone acusaron a sus rivales de no motorizarles por miedo a que fuesen competitivos. Horner reconoce que esta reticencia se entiende, pero dado que Red Bull estuvo a punto de abandonar el Gran Circo, cree que deberían haber sido más abiertos.

"Puedes entender la razón por la que Mercedes y Ferrari no querían dar su mayor arma a un equipo rival. Pero por eso hay que revisar las reglas, porque no puede estar bien que un grupo de fabricantes se pueda unir y decir 'nos contenta ver que Red Bull se va'", explica Horner, que asegura que se les cerraron más puertas cuando vieron que sus coches comenzaban a ser más competitivos a finales de 2015.

"Nuestro rendimiento en el segundo sector de Spa parecía asustar a algunos, entonces estábamos negociando con mercedes. Y nuestro rendimiento en Singapur pareció asustar totalmente a Ferrari. De alguna forma, eres una víctima de tu propio éxito, pero sólo tienes que seguir luchando y se presentarán soluciones", continúa Horner.

Horner comenta que las amenazas de Dietrich Mateschitz de abandonar la F1 fueron a raíz de la conducta de los demás equipos. "Las apariencias engañan. En verano hubo muchas negociaciones, hubo acuerdos entre individuos que luego no se cumplieron por aspectos políticos.Él estaba al frente de la negociación y creyó que tenía un acuerdo, Dietrich siempre ha funcionado con una política de apretón de manos. Así lleva su negocio y su vida", apunta Horner.

El hecho de que el acuerdo con Mercedes no funcionara fue clave. "Niki Lauda intentó que pasara pero desafortunadamente, Toto no quería ver el motor Mercedes en la parte de atrás de un coche Red Bull. Dietrich se desilusionó con la F1, lo entiendo. Los acuerdos que creía que ya estaban listos se echaron para atrás y de una forma inevitable, estaba harto y enfadado. Si observas lo que ha invertido en el deporte, en dos equipos, en el circuito, en los programas de jóvenes pilotos…Creo que en cierto momento se sintió expulsado y si la gente no quería a Red Bull en la F1, ¿por qué debería estar él ahí y poner los fondos?", finaliza Horner.