McLaren se mostraba convencida de que la llegada de Renault les iba a catapultar hasta la parte alta de la zona media de la parrilla, desde donde podrían ir progresando hasta alcanzar a los equipos punteros. La estructura de Woking hizo hincapié en la gran eficiencia de su chasis durante la pasada temporada, señalando a la falta de rendimiento del motor Honda como su mayor lastre desde el comienzo de la asociación.

La realidad no se ha correspondido con las expectativas de McLaren. Aunque los dos coches han sumado puntos en las dos primeras carreras de la temporada, el cuarto puesto de Toro Rosso en Bahréin ha puesto en evidencia los argumentos de la estructura británica. Helmut Marko no ha querido dejar escapar la oportunidad para buscar las cosquillas a McLaren señalando que son el equipo motorizado por Renault más lento.

“El señor Alonso dijo que quería atacar y estar al mismo nivel que Red Bull, pero está detrás de nuestro Toro Rosso. El McLaren no puede ser tan bueno como aseguran y ahora está claro que el motor Honda no era lo único que les volvía lentos. Continúan siendo los más lentos en la recta y esta vez llevan un motor Renault”, declaró Marko a Auto Motor und Sport.

La cuarta posición de Pierre Gasly en Bahréin fue una muestra del paso adelante dado por Honda en cuanto a rendimiento, además de ser el mejor resultado de la marca japonesa desde su regreso a la Fórmula 1. El francés terminó la carrera por delante de los dos monoplazas de McLaren, una situación que da a Marko más motivos para sacar pecho.

“McLaren no solo ha perdido un motor de Fórmula 1 que está mejorando más y más con cada vuelta. También han dejado escapar un montón de dinero que obtenían por usarlo, explicó el asesor de Red Bull, donde están muy atentos a las evoluciones de Honda para considerar un cambio a la marca japonesa la próxima temporada.