La última carrera de Nick Heidfeld en la Fórmula 1 fue el Gran Premio de Hungría de 2011. A pesar de conseguir la tercera posición en Malasia, el alemán no completó la temporada al volante del R31 y se vio forzado a abandonar la categoría. Sin suerte en la búsqueda de asiento para la campaña 2012, el ex de Williams y BMW descarta que su carrera en la máxima categoría haya acabado.

"No pienso eso, no es el caso. Por supuesto que no es fácil encontrar un puesto, si no ya estaría allí. Me estoy divirtiendo en el motorsport y ya veremos qué es lo que me depara el futuro", afirmaba Heidfeld a Auto Motor und Sport.

A pesar de no ser uno de los protagonistas de la parrilla de salida, el alemán ha asegurado que sigue siendo un gran aficionado a la Fórmula 1. En su opinión, que cinco pilotos hayan ganado las cinco pruebas disputadas hasta el momento demuestra la igualdad y espectáculo que ofrece la categoría actualmente. "Es increíble. Creo que incluso los equipos no saben qué es lo que está pasando", señalaba Heidfeld.

"Es mucho más agradable para los espectadores y también para muchas de las escuderías ya que saben que tienen alguna opción. Hace un par de años era improbable, cuando solo Red Bull y quizá McLaren podían ganar y el resto luchaba por las demás posiciones", añadía el alemán.

Meses antes de regresar a la Fórmula 1 en 2011 como piloto de Lotus Renault, Heidfeld fue probador de los neumáticos Pirelli. Siendo el primero en comprobar el rendimiento del nuevo compuesto de gomas creadas por la marca milanesa, 'Quick Nick' no está de acuerdo con las críticas de Michael Schumacher sobre el comportamiento de los neumáticos.

"Se ha quejado un poco más de lo normal y siempre habrá más bombo cuando es él quien lo dice. Por supuesto, como piloto, siempre quieres neumáticos mejores pero también te tienes que adaptar a la situación. A menudo funciona a tu favor, a veces no", afirmaba Heidfeld.