La temporada de Romain Grosjean ha sido bastante positiva dentro de la transferencia que realizó su equipo al cambiar a motores Mercedes para este año, un movimiento que esperaba escapar de la escasa fiabilidad que mantuvieron en la anterior campaña con Renault. Pero a pesar del importante avance que han experimentado, los problemas económicos que han sufrido les han hecho que la mejora no haya sido todo lo notoria que les hubiera gustado.

En esta línea, Grosjean indicaba que uno de los problemas fue la menor evolución de su monoplaza, ya que la falta de recursos económicos hacía complicado no ya sólo conseguir mejorar el monoplaza, sino poder desarrollar el trabajo operativo con el equipo. "El principal problema fue que difícilmente traíamos evoluciones al coche, y terminamos básicamente con el coche de Melbourne", explica el francés.

Tras esta temporada, el piloto galo ya está centrado en el próximo año, en el que competirá con la nueva formación americana Haas F1 Team, con la que cree que podrán ser muy competitivos desde el mismo inicio. "Creo que con la relación que tenemos con Ferrari, tendremos un buen coche. Conducir para Ferrari es un sueño para cualquier piloto, pero primero quiero ser el piloto que ayude a que un equipo americano en el camino del éxito. Empezaré a trabajar a primeros de diciembre en Maranello, allí está nuestro túnel del viento y el simulador", finaliza el ex de Lotus.