Red Bull afronta en Mónaco una de sus grandes oportunidades de la temporada para hacerse con la victoria. El equipo austriaco ya ha subido a lo más alto del cajón en 2018, en el Gran Premio de China, aunque en el Principado podría lograrlo sin necesidad de infortunios o incidencias de carrera.

Desde 2008, el equipo de Max Verstappen y Daniel Ricciardo ha metido, como mínimo, a uno de sus coches entre los cinco primeros. Las características del trazado urbano se amoldan a las prestaciones de los monoplazas de las bebidas energética y en la edición de este fin de semana no será diferente. Incluso sus rivales reconocen que Red Bull será un duro enemigo en las calles del Principado: “En España, Ricciardo era mucho más rápido en el último sector”, afirma Lewis Hamilton. “Serán rápidos en Mónaco y difícil de batir”, añade.

En los últimos años, Red Bull suele ir de menos a más a lo largo de la temporada. En Barcelona, introdujeron la primera gran actualización del curso, con nuevos ‘bageboards’, suelo y ‘sidepods’. Los signos de mejora fueron evidentes, aunque esperan que sean más efectivos en circuitos como Mónaco.

“Haremos un análisis antes de Mónaco, pero se ha visto que hemos dado un paso adelante”, admite Christian Horner. “Llevará dos o tres carreras ver cómo funcionan en realidad, añade el jefe de equipo de Red Bull.

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El hándicap de la clasificación

Pese a tener velocidad los domingos, el punto débil de Red Bull continúa siendo en clasificación. Pese a que el trazado de Mónaco le puede ir bien al RB14, también es cierto que sin una buena posición de parrilla para la carrera, pierdes un importante porcentaje de posibilidades de hacerte con la victoria. La Pole es crucial en Mónaco, donde adelantar es casi imposible.

Nuestro problema es que tenemos que hacer un mejor trabajo los sábados. Al empezar quinto o sexto, tienes aire sucio. Si puedes estar un poco más arriba, llegarán los grandes resultados. Nuestros pilotos tienes que encontrar más rendimiento, porque no somos capaces de competir con los mapas de motor de nuestros rivales”, reconoce Horner.