Tras superar la etapa europea del Mundial, Sergio Pérez no puede ocultar sus ganas de que llegue el Gran Premio de Estados Unidos, una cita que hasta este año, en el que la Fórmula 1 viaja a México, la ha considerado 'la carrera de casa'. Su sexto puesto en Monza le da confianza para afrontar el resto del año.

"Lo que lo hace tan especial es el tremendo apoyo que recibo de los aficionados mexicanos que asisten a la carrera, cada vez que voy a Austin me conmueve eso", señala el compañero de Nico Hulkenberg.

Checo es décimo en el Campeonato, por delante de su compañero de equipo. El mexicano sólo ha tenido un abandono este año, acumula ya 33 puntos y está a sólo cinco de Romain Grosjean, noveno clasificado.