No, no ha sido un buen fin de semana para Sebastien Buemí. Descalificado en la tanda clasificatoria debido a una irregularidad encontrada en su combustible, el domingo en carrera ha provocado el accidente que ha hecho abandonar a Heidfeld -en opinión de los comisarios deportivos- y a él le ha enviado a boxes a sustituir su rueda trasera derecha y algún pequeño desperfecto en su STR6.

Ambos pilotos se acercaban a la chicane y el de Toro Rosso cerró inesperadamente el avance por el exterior de Heidfeld. La rueda delantera izquierda del Lotus Renault impactó contra la trasera derecha del de Buemí efectuando el efecto palanca -también llamado 'el afilador'- haciendo perder el control al primero. El R31 de Nick se llegó a elevar casi dos metros del suelo rompiendo el alerón delantero y partes de la suspensión en su caída. Le fue imposible continuar. Por su parte el suizo si que pudo continuar; acabó en P15 a la postre pero con una notable pérdida de tiempo y un inesperado cambio en su estrategia.

"Heidfeld me golpeó llevó en la chicane y me pinchó la rueda en mi trasera derecha", dijo Buemi al acabar la prueba, "así que tuve que entrar en boxes y cambiar neumáticos, lo que comprometió aún más nuestra estrategia, sin lluvia" (esperaban que si lloviese).

"Ha sido un fin de semana decepcionante así que no podemos estar satisfechos con nuestro rendimiento. Todo lo que podemos hacer es mirar hacia adelante hacia el Gran Premio de Hungría; al menos no tenemos que esperar mucho tiempo", declaró Sebastian con pesadumbre tras bajarse de su coche.

El resultado cosechado este fin de semana no le ayuda en su guerra interna con el español Jaime Alguersuari en lo que todo apunta que pudiera significar la permanencia de uno de los dos.