La actuación de Pirelli estuvo envuelta en una gran problemática a lo largo de todo el fin de semana de carreras en el trazado belga de Spa-Francorchamps.

Las exigentes características del trazado, unido a una gran cantidad de piezas sueltas en la pista, provocaron que varios monoplazas sufrieran cortes y tuvieran neumáticos dañados.

La peor parte correspondió a Nico Rosberg, quien tuvo que cerrar su sesión de Libres 2 antes de tiempo por un reventón en Blanchimont, y sobre todo el piloto de Ferrari Sebastian Vettel, quien vio como a falta de dos giros para el final un inoportuno reventón daba al traste con sus opciones de podio.

Mucho se ha comentado sobre si fue un problema en la estrategia o se trató de un problema con los neumáticos Pirelli. Vettel dejaba claro que el equipo no actuó sólo, ya que desarrollaron la estrategia juntos:"Solo para dejar las cosas claras: el equipo y yo decidimos nuestra estrategia de carrera juntos”, afirma el tetracampeón. "Apoyo al equipo y el equipo me apoya a mí; esto es lo que nos hace un equipo. Nuestra estrategia no fue arriesgada en ningún momento. El equipo no tiene la culpa".

Sin embargo, muchas son las voces que apoyan a Pirelli. Si primero fueron Niki Lauda y Toto Wolff los que no entendieron el enfado de Vettel ni la elección de Ferrari, en esta ocasión Flavio Briatore ha dejado claro que, desde su punto de vista, la Scuderia fue demasiado lejos en su estrategia.

"Mira, es simple. Antes de la carrera tienes una indicación de cuantas paradas tienes que hacer y tienes que seguir esas indicaciones. Los neumáticos son un componente crítico del deporte, y si te dicen que debes hacer dos o quizás tres paradas, si luego eliges hacer sólo una parada es tu propio riesgo. Puede ir bien, o quizás no, así que no puedes culpar al proveedor", ha apuntado el italiano, quien al mismo tiempo cree que este tipo de polémicas siempre son buenas para el deporte.

"Al menos los medios están hablando de ello, sino solo estaría aquí diciendo por enésima vez que campeón ganó Hamilton".

Por su parte Mikka Hakkinen, bicampeón del mundo de F1 con McLaren, considera que era mejor no tomar demasiados riesgos con pistas tan exigentes como la belga.

"En Spa, por ejemplo en Eau Rouge, una enorme cantidad de carga está presionando el coche contra el suelo y contra los pianos. Los equipos tratar de analizar lo que van a durar los neumáticos y no deberían tomar demasiados riesgos".

En el lado de Vettel se ha situado un Nico Rosberg que entiende la reacción de su compatriota, pues en la jornada del viernes tuvo un problema similar y estuvo cerca de ser más que un susto: "Sé cómo se sintió Vettel cuando primero su neumático y luego su carácter explotaron", ha dicho en su columna de Bild. "Con nosotros los pilotos, las emociones pueden ir muy lejos, así que es algo normal. Tenemos familia y amigos en casa, estamos bajo constante presión para sacar el máximo", ha concluido el alemán.