El piloto brasileño, con casi 330 Grandes Premios a sus espaldas, abandonó la Fórmula 1 al concluir la temporada 2011 para empezar una nueva etapa en la Indycar series. Aún así, no descartaría volver sobre sus pasos si recibiera una invitación para ello: "Toda mi vida ha sido un libro abierto", admite. "Aunque estoy centrado en la Indy, si llega una invitación de la Fórmula 1, pensaré en ello".

"Hay que coger las ofertas, seleccionar las tres mejores y tomar una decisión", explicó el brasileño en Taubate. Además, a sus 40 años, tres menos que Michael Schumacher, mantiene las ganas de seguir en activo y que la competición siga siendo su modo de "expresión": "La Fórmula 1 se acabó demasiado pronto para mí. Soy el piloto con más experiencia, pero pensé que duraría más (su estancia en la Fórmula 1)", se ha lamentado.

"Hay gente que ha tratado de enterrarme, pero en realidad todavía no es mi momento", sentencia. Además, admite que le "encantaría" correr todavía en la Fórmula 1.

En relación a su adaptación a la Indycar, admite que le ha costado acostumbrarse, tanto a las pistas como a los monoplazas que, según explica, son muy diferentes a los europeos: "Mi problema han sido las pistas, que son mucho más bacheadas que en Europa. No lo critico, digo que el problema es parte de mi adaptación. El coche también es totalmente diferente a los 19 que he pilotado durante mi vida en la Fórmula 1".

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