Ferrari lleva sin ganar un campeonato desde 2008. La última vez que consiguieron un doblete de campeonatos fue en 2007, cuando Kimi Raikkonen conquistó su primer y único mundial.

Maurizio Arrivabene cree que, llevar tanto tiempo sin conseguir un título ha influido en la forma de trabajar y han perdido la costumbre de ganar, incluso les ha generado un miedo que deben aprender a solventar.

"Hay áreas en las que somos superiores, otras donde lo son ellos. Pero creo que todavía no tenemos la costumbre de ganar. Para ellos lograr un doblete es casi normal. Para nosotros, sigue siendo un logro excepcional. Debemos ser más conscientes de nuestros medios y no tener miedo de ganar. En el tenis lo llaman braccino: el miedo a ganar que viene cuando estás cerca del objetivo. Debemos confiar en nosotros mismos y hacer de la victoria una buena costumbre", comentó el de Ferrari.

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El italiano admite que, durante cierto periodo de tiempo de la temporada, Ferrari era más fuerte que Ferrari, pero que los errores cometidos han hecho que no aprovechasen el momento, de lo cual, Arrivabene acepta toda responsabilidad.

"Hubo un momento en 2018 en el que éramos unos fenómenos, luego una fase en la que el dedo apuntó al piloto y finalmente llegó un período en el que el coche fue el objetivo. Al final, comprendimos, aún más, que ganamos y perdemos todos juntos. Hubo errores de Vettel y, en menor medida, del equipo, pero la lección que hemos entendido es que no es necesario señalar a nadie con el dedo. Hay un responsable del equipo de carreras y soy yo. Me enfadé una vez, en Suzuka, pero creo que una vez en tres años y medio se puede aceptar. Cuando las cosas van mal, estoy aquí, y siempre lo he dicho”, explicó Arrivabene.

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El de Ferrari compara a sus dos pilotos y, aunque en algunas circunstancias se parecen, desde el equipo han tenido que mostrar apoyo a Vettel tras incidentes como el de Italia.

"Raikkonen y Vettel son similares en muchos aspectos. Pero mientras que con Kimi en algunos momentos necesitas hablar un poco más, con Seb necesitas hacer que sienta el apoyo del equipo. Fue muy criticado por lo que sucedió en Monza, pero solo estaba tratando de dar una gran satisfacción a los fans, y luchó mucho para asimilar el resultado de ese fin de semana. En este sentido, no le ayudó descubrir en las siguientes carreras que tenía un coche que no estaba en su mejor momento. Estos son problemas comprensibles y el factor humano es importante", concluyó Arrivabene.