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Famosos como Paul Newman, Steve McQueen, o más recientemente, Patrick Dempsey, que llegó a competir en las 24 horas de Le Mans, son de sobra conocidos por la gran mayoría de aficionados a las carreras. Nunca ocultaron su pasión por las carreras, en ocasiones compaginaron sus carreras de actor con este hobby, e incluso optaron por combinar ambas facetas, llevando el mundo del motor a la gran pantalla.
Sin embargo, hay otras celebrities, cuya pasión por el automovilismo y las carreras han pasado desapercibidas. En este artículo, repasamos algunos de estos casos, no muy conocidos por el gran público.
El primer nombre de la lista es el de Alfonso Ribeiro. ¿No te dice lo suficiente? Quizás ayude a localizarlo mejor al decir que fue el actor que encarnó a Carlton Banks en la serie el Principe de Bel-Air, o el Príncipe del rap en Hispanoamérica.
Alfonso, ganador del conocido programa 'Bailando con las estrellas', no solo es un gran aficionado, sino que se le da realmente bien. Ha participado en numerosas ocasiones en la Toyota Pro/Celebrity Race, un evento de Toyota celebrado en el circuito de Long Beach. Ganó la carrera entre famosos en los años 1994, 1995 y también en 2016. Pero es que, además, en 2015, también venció en la prueba disputada contra pilotos profesionales, eso sí, recibiendo una pequeña ayuda en forma de tiempo inicial.
A Ribeiro se le ha podido ver con cierta frecuencia asistiendo a eventos del motor y de hecho, este mismo año fue invitado especial de la Fórmula 1 en el Gran Premio de Mónaco.
El segundo de los nombres es el de Melissa Joan Hart, actriz, directora y productora, que también ha hecho sus pinitos como cantante, diseñadora de moda y activista. Especialmente conocida su papel de Sabrina Spellman en la serie 'Sabrina, cosas de brujas', en España –o Sabrina, la bruja adolescente, en Hispanoamérica–.
La actriz ha participado en varias ocasiones en el mencionado evento de Toyota, aunque menos talentosa que Alfonso Ribeiro, nunca ha logrado vencerlo. La afición de Melissa por el motor va más allá de eventos puntuales con tintes publicitarios, y se la ha podido ver disfrutando de categorías norteamericanas, así como sus galas y eventos.
‘Sabrina’ también dio el paso de competir como invitada en una carrera con los coches de la Women’s Global GT Series, el campeonato exclusivo para mujeres que Don Panoz realizó en Estados Unidos durante dos temporadas como telonero de las American Le Mans Series. La pasión de la actriz quedó patente, pues no dudó en aceptar invitaciones más atrevidas. Tanto, que llegó a subirse a un Fórmula Ford, en un evento celebrado en el circuito de Silverstone, donde Eddie Irvine y David Coulthard seleccionaron distintos pilotos para celebrar una serie de carreras, donde no solo compitieron con el Fórmula, sino que también se subieron a un clásico Caterham seven, así como un Mini y un Lotus Elise.
Con el siguiente nombre, se entra en una dimensión diferente. ¿Puede un actor contagiar su entusiasmo al resto de su reparto? Visto lo ocurrido en la serie 'Malcolm in the Middle', o 'Malcolm el de en medio', en Hispanoamérica, podríamos decir que sí. Y aunque fue el protagonista (con permiso de Bryan Cranston), Frankie Muniz, el que más pasión ha evidenciado, vamos a comenzar hablando del hermano mayor de la serie, Christopher Masterson.
Christopher, como otras celebridades, participó en la Toyota Celebrity Race en el año 2002. Como le ocurrió a Melissa, este actor no pudo llevarse el triunfo, pues lo impidió la nadadora y medallista olímpica Dara Torres, en una edición que pasaría a la historia, pues en la carrera Pro, también ganó una mujer, concretamente, Danica Patrick, siendo la única edición donde todos los triunfos fueron para las féminas.
Años más tarde, habiendo cumplido ya la mayoría de edad, le llegó el turno a otro hermano de la serie, al que interpretaba el papel de ‘Reese’, Justin Berfield. El actor participó en la edición de 2005, y no lo hizo solo, pues lo acompañaba su hermano pequeño en la serie, Frankie Muniz, que fue además el que le quitó cualquier posibilidad de triunfo, pues Frankie no dio opción a sus rivales y se llevó la victoria.
Frankie Muniz precisamente es el último nombre de la lista, porque es además quién más en serio se tomó su pasión por las carreras de coches. Como sus hermanos, la primera toma de contacto de Frankie en la Toyota Celebrity Race, concretamente en la edición de 2004.
Ahí no solo se dio cuenta de lo que le gustaba el mundo de las carreras, sino además pudo comprobar de primera mano que se le daba realmente bien. Tanto que en 2005 no dudó en volver, esta vez para llevarse el triunfo. Quizás sin ser realmente consciente, Frankie ya tenía dentro el veneno de las carreras, hasta el punto de que para el siguiente año, y coincidiendo con el final de la serie que había acaparado su infancia, el actor se inscribió en la Fórmula BMW USA, una de las categorías de iniciación más afamadas de todos los tiempos.
En esta primera toma de contacto con la competición real, ‘Malcolm’ compartió espacio con pilotos como Stefano Coletti, Simona de Silvestro, o el campeón de aquella temporada 2006, Robert Wickens. A pesar de sus modestos resultados, pues, al fin y al cabo, era su primer contacto y se enfrentaba con talentosos pilotos provenientes del karting, Frankie quería más.
Así pues, en 2007 se decidió a entrar en la Champ Car Atlantic, lo que sería la actual Indylights. Su mejor resultado fue la novena posición conseguida en una muy accidentada carrera en el circuito de Edmonton. Aun así, Muniz notó progresión y quiso continuar al menos un año más, repitiendo categoría en 2008.
Frankie mejoró en regularidad y acabó todas las carreras de la temporada, lo que le permitió conseguir más del doble de puntos que la temporada anterior, aunque su mejor resultado volvió a ser un noveno puesto, esta vez en la carrera cierre de la temporada, en Road Atlanta.
El mundo del Motorsport es extremadamente caro, incluso para un actor profesional, motivo por el que Muniz meditó mucho si continuar en competición o no, y decidiéndose por darse una última oportunidad y repetir categoría en 2009. En esta ocasión, compartiría equipo con una piloto que le ha ido acompañando desde sus comienzos en la Fórmula BMW, Simona de Silvestro.
Los resultados de Frankie mejoraron así como su competitividad, pero también es cierto que la lista de inscripción de esta temporada fue más baja que las temporadas anteriores. El actor estuvo cerca de conseguir su primer podio en el circuito Miller Motorsport Park, donde acabó en cuarta posición en el que al final sería su mejor resultado de la temporada.
Esta temporada terminó antes de tiempo después de que, a raíz de un accidente, Frankie sufriese daños en su muñeca y necesitase recuperación. Debido a los altos costes que esta afición tiene, y que realmente el piloto fue consciente de las limitaciones que iba a tener para crecer, decidió poner punto y final a su carrera como piloto, al menos de momento.
Frankie volvió a los circuitos en 2011, de nuevo invitado al evento de famosos de Toyota, donde consiguió un gran resultado, y más tarde a una prueba de turismos, en la copa monomarca de Mazda MX-5, pero no fue suficiente como para que el piloto decidiera darle una segunda oportunidad a este mundo.
Desafortunadamente, poco después, Frankie sufrió un doble accidente isquémico que le obligó a medir muy bien sus actividades. Tras ese periodo y aunque el actor afirmó encontrarse en buen estado de salud, si reconoció haber perdido memoria, incluyendo muchos recuerdos de su infancia, así como los referentes a la serie que le acompañó en su adolescencia. Esto no ha evitado continuar con su actividad profesional, así como formar parte de un grupo de música o participar en bailando con las estrellas.
En cuanto a volver a la competición, lo más cercano fue en 2015, cuando Frankie interpretó a un piloto de carreras en la adaptación americana de la serie española Los misterios de Laura, ocurriendo el episódio en torno a una carrera de resistencia, amén de subirse al Fórmula 1 biplaza en el Gran Premio de España del año 2017, siendo uno de los elegidos que pudo inaugurar esta experiencia.
