El Departamento de Movilidad de San Sebastián está llevando a cabo una campaña de controles específicos a conductores de coches, motos y bicicletas desde el pasado viernes hasta que termine el año. Algo que podemos considerar razonable, pero que nos ha llamado especialmente la atención por el excesivo número de multas que ha supuesto.
Tal y como informan desde Diario Vasco, el dispositivo especial llevado a cabo en Donostia ha superado con creces todas las expectativas, pues las 636 multas de velocidad que se han aplicado en una semana suponen la mitad de las infracciones que se ponen a lo largo del año con estas cámaras móviles. En total, han sido 12.158 los vehículos verificados en 15 localizaciones distintas.
Seguramente los conductores se vieran sorprendidos y es que, según nuestros colegas, el Departamento de Movilidad de San Sebastián no informó del dispositivo especial llevado a cabo con radares móviles. Además, cabe destacar la intensidad del mismo, pues fueron 31 los controles realizados a lo largo de los siete días, sin olvidar la ubicación de algunos de ellos en zonas completamente nuevas donde los conductores no se esperarían su presencia.
El puente que da acceso a la Autovía del Urumea concentró el 55% de las infracciones totales, ya que se recogieron 352 multas de velocidad en 5.164 controles realizados en dicha zona. Por su parte, la Avenida de Tolosa registró un total de 97 infracciones y 1.830 controles. Cabe destacar que la multa más acusada de todas corresponde a un vehículo que circulaba a 106 km/h en una zona limitada a 50.
Desde el departamento encargado de este dispositivo aseguran que los criterios llevados a cabo para la elección de las distintas localizaciones donde se instalarían los radares móviles se han basado en la siniestralidad y las quejas de los ciudadanos por el exceso de velocidad.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
