Hasta que llegue al mercado el espectacular Aston Martin Valkyrie, los aficionados a las emociones fuertes y al máximo rendimiento se tendrán que conformar con otro producto de Gaydon cuyo nombre es Vulcan. Lamentablemente, las 24 unidades de este deportivo están destinadas únicamente a su uso en circuito… o no.

Una compañía británica llamada RML Group acaba de cumplir en realidad el sueño de muchos aficionados al convertir una unidad del Aston Martin Vulcan en el primer ejemplar del mundo completamente legal para su uso por la calle. Para ello, han tenido que realizar alguna que otra modificación sobre el deportivo diseñado para los circuitos y que ahora permitirá disfrutar a su afortunado propietario de un inolvidable paseo por cualquier carretera.

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El resultado de homologar este Vulcan es un producto ligeramente diferente al original. En su parte delantera encontramos un nuevo capó que integra unos grupos ópticos novedosos y que obligan a los originales a utilizarse como luces diurnas. En la zaga, aparecen unos intermitentes situados en los extremos del voluminoso alerón, un recubrimiento de plástico que protege a las luces originales y un par de reflectantes por debajo de estas.

Otros cambios realizados afectan al interior, especialmente a la comodidad de su habitáculo, con la presencia de nuevos asientos y a la altura del vehículo que ha aumentado su distancia al suelo 30 milímetros para poder circular de manera más civilizada por la ciudad. En la parte mecánica no ha habido modificaciones y sigue contando con un propulsor atmosférico V12 de 7.0 litros con 820 caballos.

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No es de extrañar que con el paso del tiempo veamos más ejemplares de este tipo después del gran trabajo realizado por estos chicos. Te dejamos con el vídeo.

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Borja Díaz

Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta