Fue aprobado el pasado 7 de noviembre, se acaba de publicar en el BOE y la información la recoge la agencia Europa Press. Se trata del denominado Plan Movalt que sustituye al anterior Movea. Veamos que propone.

En primer lugar el objetivo es claro: busca incentivar la compra de vehículos impulsados por energías alternativas, principalmente eléctricos, pero no solo. También se incluyen lo de gas licuado del petróleo –GLP–, gas natural comprimido –GNC–, gas natural licuado, pila de combustible de hidrógeno y motocicletas eléctricas.

Estas ayudas tienen una cuantía de 20 millones de euros que serán gestionados por el IDAE –Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía–, que estima que esta cantidad supondrá una ayuda a la compra de unos 5.600 vehículos que irán a parar a personas físicas y autónomos, así como a empresas y entidades públicas y privadas.

La cuantía de estas ayudas variará según el tipo de combustible elegido. Así, los modelos de GLP recibirán entre 500 y 15.000 euros en función de sus características mientras que los de gas natural obtendrán entre 1.000 y 18.000 euros.

Este Plan Movalt también tiene una cantidad extra –15 millones de euros– para infraestructuras de recarga.

Por su parte los vehículos eléctricos y de pila de combustible podrían tener una subvención de 5.500 euros, mientras que los híbridos enchufables recibirían entre 1.100 y 15.000 euros y las motos eléctricas entre 700 y 750 euros.

Este Plan Movalt también tiene una cantidad extra –15 millones de euros– para infraestructuras de recarga. Se busca con esta cuantía potenciar la instalación de sistemas de recargas para baterías de vehículos eléctricos.

Según la Administración esta cifra supone incrementar en 30 veces más lo invertido en el anterior Plan Movea y demuestra el interés del Gobierno por impulsar el coche eléctrico, dado que uno de los problemas que frena su adquisición es la falta de infraestructuras.