Motores más modernos, menos peso... Son maneras de hacer un coche más eficiente. Pero hay otro aspecto que seguro alguna vez hemos escuchado (esencial en competición) con el que a veces las marcas presumen de tener un coche eficiente: el coeficiente aerodinámico. Y podríamos decir que en este campo hay un nuevo rey, el Mercedes-Benz Clase A Sedán 2019.
El nuevo modelo de la casa alemana ha registrado un valor Cd de tan solo 0,22, superando ligeramente de esta manera a su hermano el Clase A de 5 puertas, con un Cd de 0,25 y situandose en valores similares a los de el Mercedes CLA 180 BlueEFFICIENCY.
Se trata eso sí de un título que abarca solo a los vehículos de producción en serie porque sigue quedandose por detrás de los sorprendentes 0,189 del híbrido Volkswagen XL1.
Además de por sus llamativas líneas marca de la casa de Mercedes, este hito se ha logrado gracias a otros detalles como una reducción del área frontal (2,19 m2), un sistema activo en la en la zona del radiador que minimiza la entrada de aire en función de las necesidades, un sellado más efectivo en el entorno de los faros y una zona inferior prácticamente carenada en su totalidad.
Otra de las claves son unos deflectores optimizados para dirigir el aire alrededor de las ruedas de la manera más eficiente posible evitando así tubulencias. Algo a lo que también contribuyen unas llantas y neumáticos mejorados para favorecer la aerodinámica.
Con todas estas claves el Mercedes Clase A sedán fue sometido a infinidad de pruebas como simulaciones CAE o mediciones en el tunel de viendo que la compañía alemana tiene en Sindelfingen para obtener la mínima resistencia al aire con la que se consigue, junto con unos motores más eficientes, un consumo de combustible más reducido.
El Mercedes Clase A sedán 2019, que saldrá de las factorías de Rastatt, en Alemania, y Aguascalientes, en México llegára a los concesionarios a finales de este año.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
