Uno de los modelos que hemos venido anunciando con mucho ímpetu desde hace meses era el BMW M2 Competition. Con un nuevo motor bajo el brazo, heredado de sus hermanos mayores M3 y M4, un chasis revisado con nuevos ajustes en la suspensión y una serie de elementos visuales que lo identifican, esta versión hará que muchos se olviden del ‘estandar’, o quizás no.

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El preparador G-Power es uno de ellos y ha pensado que la mejor forma de olvidar momentáneamente al Competition es con una serie de mejoras que sitúen al BMW M2 por encima de este. El principal protagonista de esta preparación es el bloque conocido como N55, es decir, un 3.0 litros turboalimentado de seis cilindros en línea con 370 caballos. Pero como puedes imaginar, estas cifras son cosa del pasado.

Gracias a un mapa motor más agresivo, un intercooler de mayor tamaño, turbocompresores con caudal aumentado, downpipe optimizada y una línea de escape de titanio específica que va acompañada de cuatro salidas de carbono, el compacto alemán consigue 500 caballos y un par máximo de 630 Nm. Todo ello le permite mejorar notablemente sus prestaciones y ahora necesita 3,9 segundos para alcanzar los 100 km/h, mientras que su velocidad máxima es de 310 km/h.

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Por otro lado, este preparador no se ha olvidado de algunos detalles tan importantes como la dinámica del vehículo y es por ello que ofrece una suspensión roscada G2M RS perfecta para transmitir toda esa potencia al asfalto de la forma más eficaz y segura. Además, su aspecto exterior será mucho más reconocible gracias a una tonalidad verde que se extiende por todo el conjunto y a unas llantas forjadas Hurricane RR de 20 pulgadas de diámetro terminadas en color negro.

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G-Power también ofrece los elementos de esta preparación por separado. De esta forma, las mejoras de la ECU cuestan 3.250 €, el limitador de velocidad 668, las modificaciones en el turbocompresor por 2.479, downpipe 966, intercoolers 1.328 y el sistema de escape por algo menos de 5.000 euros.

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Borja Díaz

Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta