Es normal que de vez en cuando si somos muy apasionados de los deportivos y no tenemos los medios suficientes como para comprar uno, recurrir a servicios de alquiler para poder disfrutar aunque solo sea por un día del coche de nuestros sueños.
El conductor de 23 años de edad de este Lamborghini Huracán parece que pensaba lo mismo, sin embargo añadió a la ecuación algo incompatible cuando manejamos más de 600 caballos entre nuestras manos, la inexperiencia y el alcohol.
Al parecer este conductor fue sorprendido circulando a alta velocidad por la policía de Edmonds, Washington. Su acompañante portaba una cerveza de la mano, lo que hizo que los agentes trataran de detener el vehículo. Como os imagináis, el conductor no se detuvo sino que aceleró, y las consecuencias se pueden apreciar en las imágenes.
Tras unos minutos de persecución, el conductor perdió el control y se estrelló contra otro coche dejando bastante dañado el morro del Huracán. Afortunadamente nadie resultó herido.
Posteriormente, el chico fue detenido y su acompañante multada por estar en posesión de alcohol siendo menor de edad. La cosa no acaba aquí, ya que el Lamborghini era un coche de alquiler puesto a nombre del hermano del conductor. A ver como se lo explica…
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta