Según AEA –Automovilistas Europeos Asociados– un 10% de las sanciones de velocidad impuestas por Tráfico en 2016 no son correctas, dado que una nueva sentencia ha confirmado que la DGT sigue sin aplicar correctamente el margen de error de los radares.

Efectivamente, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 18 de Madrid ha estimado el recurso planteado por los abogados de esta Asociación en defensa de uno de sus socios al que Tráfico le había impuesto una sanción de 300 euros y la pérdida de dos puntos de su permiso de conducir por circular a 152 kilómetros/hora por la autopista de peaje R-2 a la altura del kilómetro 48, en la provincia de Guadalajara, y ha reducido la sanción a 100 euros sin pérdida de puntos.

Esto se ha debido a que aunque, según Tráfico, se habían tenido en cuenta los márgenes de error legalmente establecidos, estos no se aplicaron correctamente dado que si se aplicase el margen de error del cinemómetro utilizado –uno fijo cuyo margen es un 5%– la sanción hubiese sido por circular a 144,40 no a los 152 comentados. Según AEA, además hay que aplicar el margen de error sobre la velocidad que consta en la foto.

Según AEA los tribunales anulan o reducen una de cada tres multas impuestas por la DGT.

Esta Asociación de defensa de los conductores calcula que desde mayo de 2010 se han impuesto en España cerca de un millón de multas con importes y retiradas de puntos superiores a los establecidos en la Ley de Seguridad Vial. Sanciones ilegales que se han impuesto no sólo por la DGT, sino también por el Servei Catalá de Tránsit y el Gobierno Vasco.

“Sólo en el último año -indica el presidente de AEA, Mario Arnaldola DGT ha impuesto 285.137 sanciones por exceso de velocidad con importes y detracción de puntos por encima de lo que marca la ley. Esta cifra supone aproximadamente el 10% del total de las denuncias formuladas por los radares fijos y móviles de la DGT en 2016”.

Según AEA, en los últimos años, desde 2011 a 2016, el índice de litigios frente a las multas de la DGT ha sido relativamente bajo, aproximadamente unos 4.500 procesos judiciales cada año, con un porcentaje de sentencias estimatorias a favor de los automovilistas en torno al 35%. Esto supone que los tribunales anulan o reducen una de cada tres multas de la DGT.