Citroën ha impulsado un salto de calidad notable en sus últimos modelos tratando de mantener un precio asequible. ¿El objetivo? batir a sus duros rivales asiáticos y americanos, que cada vez mejoran más sus productos, atentos a las exigencias de la clientela europea. Por este motivo el sustituto del Xsara Picasso -por cierto, uno de los modelos con más éxito comercial de los últimos años- es tan diferente a primera vista, aunque en el fondo sea fiel a la filosofía de su predecesor.

Conducción

La facilidad para maniobrar y la comodidad para viajar son excelentes en este monovolumen, idóneo para largos viajes y válido para el día a día, pero que nadie espere el comportamiento de una berlina en carretera. El bastidor presenta ciertas limitaciones dinámicas y en la primera curva exigente comprobamos como el ESP interviene con premura. Es imposible ir rápido en las zonas reviradas y en este aspecto es claramente superado por rivales como el Ford C-Max, el Seat Altea XL o el Kia Carens.
El C4 Picasso es uno de los mejores monovolúmenes del mercado para quienes valoran el confort, los buenos acabados y la estética por encima de las prestaciones y la dinámica.

En la misma línea, el motor 2.0 HDI de 138 caballos nos otorga la potencia suficiente para subir a buen ritmo cualquier puerto, aunque vayamos cargados, y en autovía también es agradable pero solo si no rebasamos los 140 km/h. Nada de ir más rápido, a altas velocidades el motor es bastante ruidoso y no demasiado eficaz. Este motor se ofrece únicamente con cambio CMP o CAS. El segundo es el cambio automático habitual de Citroën, que es más caro y su funcionamiento es de sobra conocido. La novedad es el CMP, un cambio manual pilotado que mejora las prestaciones del primero y reduce su consumo.

El CMP ofrece dos modos de conducción ‘automático’ y ‘manual’ y requiere -en cualquiera de los dos programas- que el conductor ponga de su parte.

Se debe aprender a usar el acelerador como si se tratara de un cambio manual, levantando el pie al cambiar de marcha. En posición ‘A’ el cambio decide cuando engranar una marcha más o menos, mientras que en posición ‘M’ sólo reduce marchas cuando es necesario. Lo más dificultoso es el tacto de la marcha atrás, hay que maniobrar a punta de gas para no tener sustos. Un consejo, lo mejor es manejar el cambio mediante las levas situadas tras el volante, dejar la palanca en posición ‘A’ y olvidarse de ella, puesto que manejarla sin accionar los limpiaparabrisas es prácticamente imposible dada su mala ubicación y, además, en esta posición nos obedece igualmente.

Seguridad

La seguridad se ha convertido en prioridad absoluta para Citroën en los últimos años y el C4 Picasso es el mejor ejemplo. Ya no es que haya obtenido la calificación 5 estrellas EuroNcap, es el cómo lo ha logrado, sumando una puntuación total de 35 puntos sobre 37 posibles. Un sobresaliente en toda regla. Además, tiene 3 estrellas en protección para niños y dos en prevención en caso de atropello a peatones. Sin duda, está entre los mejores de su clase en este aspecto.

Confort

La vida a bordo del C4 Picasso es inmejorable. El interior nos convence por el espacio y la buena calidad de los materiales, que brilla al primer vistazo gracias a la buena iluminación del habitáculo. La amplitud de la luna delantera, junto con el techo panorámico -no practicable- permiten una luminosidad excelente, a la vez que se consigue una visibilidad inmejorable. Los espejos retrovisores exteriores son grandes y en el interior se añade otro más pequeño (por encima del convencional) muy práctico para controlar las plazas traseras y también para ver algunos ángulos muertos.

El espacio está bien distribuido. El freno de mano eléctrico y la posición elevada de la palanca del cambio permiten una zona despejada entre los dos asientos, aprovechable para estirar las piernas detrás y para instalar una toma de corriente. Además, los huecos útiles facilitan mucho las cosas, hay tres guanteras con espacio suficiente y una buena nevera en el centro con capacidad incluso para dos botellas de litro y medio, por ejemplo. La ergonomía también es óptima, los mandos están dispuestos de forma coherente, incluso los del centro del volante, que presentan un inconveniente: son demasiados.

El C4 Picasso puede disponer de un nivel de equipamiento alto. Los extras son satisfactorios tanto por el precio como por el resultado que ofrecen.

El cuero, por ejemplo, es de buena calidad y el sistema que integra ordenador de viaje, teléfono (con ranura para tarjeta SIM y control de voz), navegador, radio y agenda, es de lo mejor del mercado.
En las plazas traseras la amplitud continúa. Los tres asientos individuales nos permiten modular el espacio a nuestro antojo y además encontramos climatizador independiente, así como bandejas con posavasos y luz de lectura. Perfecto.

Ecología

En el Picasso el motor 2.0 HDI está asociado a una transmisión de relaciones cortas, que premia la fuerza sobre la velocidad punta y, por tanto, ofrece unas prestaciones más parecidas a las de un Jumpy o un Berlingo que a las de un C5 y no favorece en absoluto el consumo. Eso sí, si no vamos a ir rápido no debe de ser ningún inconveniente, sino todo lo contrario. A un ritmo normal el motor gira entre las 2.000 y las 3.000 vueltas y consume una media de 6,6 litros/100kilómetros, en régimen mixto. Es decir, unas décimas por encima del consumo que anuncia Citroën de 6,1 y que se traduce en unas emisiones de C02 de 159 gr/km.

Veridicto

El C4 Picasso se postula como el gran favorito para quienes desean un coche confortable, espacioso y bien equipado por un precio razonable. Sin embargo, en comportamiento dinámico y prestaciones se ve superado por alguno de sus rivales como el Kia Carens o el Seat Altea, por ejemplo. Eso sí, ambos están bastante lejos del Citroën en todo lo referente a habitabilidad. En definitiva, nos encontramos con una serie de alternativas interesantes en el segmento de los monovolúmenes y, por menos de 30.000 euros, queda en el criterio de cada uno elegir entre uno más eficaz y ‘deportivo’, u otro más práctico y elegante. Y entre los del segundo grupo destaca este C4 Picasso.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.