Suena alocado, y puede que sea así si pensamos que hace 40 años el ciclista francés Jean- Claude Rude intentó dejar una gesta para la historia en un famoso proyecto con Porsche y el por aquel entonces piloto oficial de la marca Henri Pescarolo de alcanzar los 240 km/h en bicicleta a rebufo de un Porsche 935 de 800 CV, nada menos. La búsqueda de un ambicioso récord de velocidad con un listón cada vez más alto pero que en esa ocasión se encontró con más de un contratiempo, el último de ellos un reventón de la rueda trasera a más de 150 km/h al no soportar el neumático de la bicicleta la velocidad.
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Y 40 años después de aquello se ha intentado de nuevo para lograr, esta vez sí, alcanzar esa velocidad. De nuevo con una bicicleta diseñada específicamente para lograr el récord y de nuevo a rebufo de un Porsche, aunque en esta ocasión se trata de un Cayenne Turbo 2018, con 550 CV. El ciclista británico Neil Campbell se ha convertido así en la primera persona en Europa en alcanzar los 240 km/h sobre una bicicleta.
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La gesta ha tenido lugar en el aeródromo de Elvington, en Yorkshire (Inglaterra) y se ha logrado gracias a varias claves: la primera claro está es la bicicleta, específicamente diseñada por Moss Bikes para ser lo más eficiente, resistente y estable posible a altas velocidades. Para ello se ha fabricado con fibra de carbono y tecnología de impresión en 3D y también se han añadido neumáticos especiales y una distancia entre ejes mayor a la habitual.
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La otra clave es el coche que hace de rebufo. Un Cayenne Turbo con un motor V8 biturbo 4.0 y una pantalla instalada detrás para ofrecer un rebufo completo al ciclista. Con todo, el coche debe contar con la potencia suficiente para lograr el récord antes de que la pista se acabe (porque sí, con 3,2 km el aeródromo no es precisamente largo) y que esa potencia sea lo suficientemente lineal para permitir que el ciclista pueda coger la velocidad suficiente y mantenerse a la distancia adecuada, ni mas ni menos, además de contar con que se añade un importante elemento atrás que puede frenar su velocidad. Para ello el Cayenne cuenta con 550 CV y 770 Nm, para una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y una punta de 285 km/h.
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Así, con todos estos factores el Cayenne, con el piloto Andy Frost al volante, remolcó la bicicleta hasta alcanzar los 177 km/h para en ese momento dejar a Neil Cambell sólo con sus piernas y los pedales. En el paso por el radar dejó una velocidad de 240 km/h que confirma el récord, en este caso europeo, pero que Campbell confía en volver a batir muy pronto para quién sabe si alcanzar un récord mundial.
